Paul Vásquez, ‘El Flaco’: “Soy colocolino desde la cuna, pero ser socio es algo maravilloso”

lunes 10 de febrero, 2020

Por: CSD Colo-Colo
El humorista recibió su carné de socio de manos de la Vicepresidencia de Desarrollo Social del CSD Colo-Colo y repasó lo que han sido estos meses de revuelta popular y su rol como bombero.

‘Mira, mira, el flaco’. ‘Sí, mira. Es el Flaco’. ‘Grande Flaco’. ‘Gracias Flaco’. Se escuchaba el murmullo de la gente en la puerta principal del Centro Cultural Gabriela Mistral (GAM), cuando Paul Vásquez llebaga hasta su ingreso para conversar con José Serey, Vicepresidente de Desarrollo Social del CSD Colo-Colo y el equipo de ‘Pasión del Pueblo’.

Vásquez, quien gracias a su altura no podía pasar desapercibido, se daba el tiempo para saludar y fotografiarse con cada una de las personas que se le acercaba mientras se montaban un par de exposiciones artísticas y autogestionadas por manifestantes.

Usaba una polera de los Bomberos de Nueva York, y en uno de sus brazos llevaba el traje de bombero, casco de seguridad, antiparras y una mascarilla para evitar el contacto directo con las bombas lacrimógenas, todo eso, debido a que Paul Vásquez cumple con labores de rescatista en las movilizaciones que se desarrollan desde el 18 de octubre en la Plaza de la Dignidad.

El humorista que se presentará en el Festival de Viña del Mar la noche del jueves 27 de febrero, repasó su cercanía con Colo-Colo, el estallido social, la rutina que tendrá esa jornada y el vínculo con la gente.

No puedo disimular el nerviosismo, y no sólo porque eres una persona famosa, sino que también, porque estos últimos meses has estado junto a miles de manifestantes en las calles. ¿Cuáles son tus motivaciones para manifestarte y ser bombero?

Primero que todo, no me considero una persona famosa. Popular, quizás. Tal vez. (Ríe). Lo que me motiva es el pueblo. El pueblo oprimido, el pueblo postergado, el pueblo olvidado, el pueblo segregado. Eso me motiva, me motiva ver tanto chico herido, mutilado, muertos, y la verdad es eso lo que me motiva para estar en la calle.

Te vimos en el velorio y en el funeral de Jorge Mora y para el ‘The Clinic’ mencionabas que 'había que estar ahí porque Carabineros iba a ir a provocar'. Pero de seguro había otras motivaciones, porque Jorge era colocolino y parte de un espacio común que no sólo era el estadio, sino que también la calle.

Es que no era necesario lo que le pasó al ‘Neco’. Es una muerte innecesaria. No es justo que los chiquillos mueran de esa forma. Fui a su casa porque el ‘Neco’ tiene un hijo que quedó desamparado. Que va a tener el apoyo de los familiares, seguro, pero a él lo dejaron sin papá. Esto, ya no debería pasar.

La indolencia que tiene el gobierno ante esto, no visitar a la gente mutilada, que le han quitado la visión. Esas cosas a mí me motivan para estar cada día, en cada momento con la gente, con la juventud, esta juventud valiente y combativa que no es la misma a la de los 80.

A nosotros nos ponían toque de queda y nos escondíamos pos, hueón. Nos guardábamos y no nos asomábamos a las ventanas, era como estar secuestrados en nuestro hogar. Esta juventud no va a parar y los invito a que vengan a luchar. Y cuando ganemos, porque hasta ahora no hemos ganado nada, cuando ganemos, tomémonos un montón de chelas para celebrar. Ahora estamos en lucha y debemos hacerlos sobrios y lúcidos.

La gente te saluda, te reconoce, se detiene a darte un abrazo y una palabra de aliento. Te sienten como uno más. ¿Cuál es tu sensación cuando tanta gente te entrega su apoyo y respeto?

Mira, en las redes sociales, hay algunos que dicen que soy populista, otros dicen que quiero ganar adherentes y otros dicen que es para buscar fama. La verdad es que no busco adherentes, y te lo digo porque antes de 1996, ya tenía mi público. No soy populista, yo soy un chico de barrio. Nací en la Villa O'Higgins en La Florida, soy uno más. Conozco lo que ha pasado la gente. No soy clase media, soy asalariado, trabajador y proletario.

Recibes tu credencial de socio del Club y como Colocolino también te encuentras con otros en la calle. ¿Cuál es el mensaje a esos colocolinos, a esos socios de la Institución?

Es maravilloso tener mi carné a los 53 años. Yo soy hincha de Colo-Colo desde la cuna, entonces ser socio, ahora, es algo ma-ra-vi-llo-so. Más encima mi camiseta rebelde y mi chapita que voy a lucir en todos lados.

¿La vamos a ver en el festival?

Sipo, todo el rato.

¿La camiseta igual?

La camiseta no sé, está difícil. La chapa, sí.

No puedo dejar de preguntarte sobre la rutina en el Festival de Viña del Mar, que, entre todas las cosas, es una tribuna para dar un mensaje. Decías que no harías humor sobre la revuelta popular porque ha habido gente que lo ha pasado mal con este proceso, pero. ¿Imagino que te referirás al tema?

Sí, obviamente no puedo hacerme el hueón y no tocar el punto, pero de otro enfoque en el sentido que no haré burla de lo que ha pasado, mucho menos sobre los caídos. A todo esto, honor y gloria para todos ellos. Pero sí tocaré el tema y tengo mi queja también y la voy a dar.

¿Una queja que has vivido como persona antes de ser popularmente conocido como humorista?

Claro. Si. Por eso, estoy al lado del pueblo, estaré siempre firme al lado del pueblo, y lo otro, cuando el primer viernes después de la muerte del ‘Neco’, mis ojos vieron una cosa maravillosa que no logró ni siquiera la selección, y fue ver a las hinchadas unidas, eso, para mí fue hermoso, poder verlos todos juntos por una causa común. Aguante mi Chile, aguante la juventud y aguante Colo-Colo, lo más grande de todo.

Muchas gracias, Paul. ¿Te quedarás por acá?

Gracias a ustedes, muchachos y cuídense. Me voy a quedar acá con los demás.